Artistas europeos reclaman en Bruselas una mayor protección de sus derechos en Internet

Así se ha anunciado en un acto en Bruselas en el que han participado artistas españoles para explicar la propuesta de esta entidad. En concreto, los músicos Nacho García Vega y Javier Campillo y el actor José Manuel Cervino han presentado las principales líneas de actuación de la campaña y han pedido a las instituciones europeas la protección de sus derechos en el ámbito digital.

En un comunicado de prensa, Fair Internet Campaign ha denunciado que las plataformas de música digital como Spotify, Apple Music o Google Play alcanzaron en 2016 el millón de suscriptores en España, mientras que las discográficas obtuvieron de ellas 90 millones y "sólo una minoría" de artistas percibieron algún tipo de contraprestación por la explotación de sus contenidos en Internet.

La entidad denuncia que los artistas "pierden el control" de la explotación de sus interpretaciones cuando firman un contrato de producción y ceden todos sus derechos al productor de la obra de manera generalmente automática y para cualquier forma de explotación.

En opinión de la campaña en defensa de los derechos de los artistas europeos, es "escandaloso" que éstos perciban "una ínfima o nula compensación" por la utilización de millones de sus interpretaciones y reproducciones mientras las plataformas digitales, las productoras cinematográficas y las discográficas multinacionales "se reparten millones de euros por explotar el trabajo y el talento de los artistas".

Por ello, Fair Internet Campaign defiende la necesidad "acuciante" de que los intérpretes europeos se puedan amparar en un "derecho irrenunciable de remuneración" por la "puesta a disposición de sus interpretaciones en el entorno digital". Esta remuneración garantizaría un pago específico a los artistas siempre que sus interpretaciones se pongan a disposición del público en Internet a la carta.

La gestión de esta remuneración, explica la organización, recaería sobre entidades de gestión colectiva de los artistas y serían los usuarios los encargados de sufragarla, es decir, aquellas entidades que pongan estos servicios a disposición del público a la carta.