Las nuevas tecnologías, marca diferenciadora de muchos museos españoles

“Por ejemplo, hace poco salió una aplicación móvil para el Thyssem, que ha tenido mucha repercusión. Hoy en día, queremos que la experiencia en los museos se complemente con las nuevas tecnologías, que las tenemos a nuestro alcance, en nuestros bolsillos. Los museos están empezando a ver esa realidad y a considerarla un referente dentro de sus políticas de promoción”.

Belloso ha realizado estas declaraciones coincidiendo con la inauguración del curso “Unity 3D, herramienta para la difusión del patrimonio. Museo y virtual”, que dirige hasta el miércoles en el marco de los cursos de verano que la Universidad Pablo de Olavide celebra cada año en su sede de Carmona. En este seminario, los alumnos tienen la oportunidad de conocer las posibilidades y el manejo del programa informático 3D a la hora de crear un museo virtual para web que contenga la recreación virtual en 3D en tiempo real con contenidos reales o imaginarios. Asimismo, se están abordando las nuevas tendencias museográficas que utilizan como base las nuevas tecnologías de la información, incluida la realidad aumentada aplicada al patrimonio.
 
Unity 3D es un motor de desarrollo gráfico que permite ofrecer entornos virtuales de gran calidad. Su manejo es sencillo y se trata de un programa gratuito y de libre utilización, lo que lo convierte en una “herramienta perfecta para su uso en la difusión del patrimonio a través de la creación de museos o guías virtuales, proyectos de investigación o cualquier otra aplicación donde el patrimonio esté presente”, explica Belloso, de manera que las TIC “facilitan y acercan a los visitantes a los museos, a los contenidos en muchas ocasiones escasos o de difícil acceso o que por su estado de conservación no se permite su visión o uso”, añade.
 
El responsable de la empresa MiraMultimedia ha asegurado también que la introducción de las nuevas tecnologías en los museos es muy importante, puesto que suponen un valor añadido. “Las nuevas tecnologías ponen a nuestro alcance herramientas útiles y accesibles que la gente demanda  en la actualidad y, como tal, son tan importantes como tener una buena colección”.

En este sentido, Belloso ha considerado que los museos se están adaptando a los nuevos tiempos de forma muy lenta, adaptación basada en la formación de las personas que dirigen estas instituciones: “Hablamos de personas que, por ejemplo, llevan 30 años dirigiendo una entidad y que empezaron en un tiempo en el que esta tecnología no existía, por lo que son poco conocedores de las mismas. Por ello, necesitan estar al día en este tipo de cuestiones. Hoy en día, el tipo de inversiones que podemos ver en los museos es la adquisición de mejores colecciones. Sin embargo, las personas responsables tendrán que darse cuenta de que no sólo tienen que tener mejores colecciones, sino que éstas tengas las tecnologías que faciliten su comprensión y podamos hacer una experiencia y un disfrute aún mejor.  Y eso no tiene ya nada que ver con tener una página web o una pequeña aplicación, sino que tenemos que ofertar una experiencia diferente”.

En opinión del director del curso, si en el pasado la exposición de elementos muebles en unas estanterías eran la metodología de comunicación entre los usuarios y las diferentes colecciones, Internet o los nuevos medios audiovisuales están rompiendo este canal unidireccional que antes se establecía entre lo que el museo te ofrecía y lo que el usuario recibía: “La capacidad multimedia y multimensaje que nos ofrecen estas tecnologías multiplican exponencialmente las posibilidades de comunicación entre usuario pasivo y colección pasiva por un nuevo modelo donde el usuario es activo, llegando incluso a la gestión de sus propios contenidos, convirtiéndose el museo en un lugar interactivo que suministra al usuario más y mejores contenidos”.

De esta manera, la idea es que se produzcan más y mejores visitas, cargadas de mayor contenido. Y que consigan fidelizar al visitante, haciéndolo no sólo participe de esta experiencia, sino conseguir que vuelva al museo más veces. “Claro que sólo podremos conseguirlo si somos capaces de ofrecerle una experiencia diferente a la anterior. Quizás este sea el cometido principal de las nuevas tecnologías, la actualización de contenidos”, ha finalizado este experto.