"El estudiante va a conocer una serie de derechos que tiene, y que probablemente desconocía"

¿Qué es Insulae?

Insulae es una plataforma que nace a raíz de la suspensión de las clases presenciales de la Universidad de Granada para ayudar a aquellos estudiantes que tuvieran contratos de alquiler.

Muchos estudiantes se quedan con un piso que tienen alquilado hasta final de curso, la mayoría hasta julio, que ya no van a necesitar usar porque ya no se quedan en la ciudad donde acuden a la Universidad porque se van a sus municipios donde tienen su residencia habitual.

¿Cómo surge?

Nos reunimos un grupo de estudiantes y graduados de la Universidad de Granada y decidimos que había que hacer algo ante esta situación. Había que prestar algún tipo de asesoría donde ofrecer a los estudiantes donde poder explicarles cómo solventar la difícil situación en la que se encuentran ahora. Nadie estaba prestando este servicio. Ese fue el principal motivo que nos llevó a dar este paso adelante. Lo que no esperábamos era recibir tantísimas demandas.

¿Quiénes forman el equipo de Insulae?

Somos estudiantes de Ciencias Políticas y Sociología que ya veníamos trabajando desde la perspectiva sociológica y política el tema de la vivienda y dos estudiantes de Derecho y un equipo jurídico de dos personas graduadas en Derecho.

¿Actuáis solo en Granada?

En el inicio sí, pero una vez que nos dimos a conocer, las solicitudes de ayuda se desbordaron y ahora estamos resolviendo casos de toda España. No queremos buscar enfrentamientos ni acabar en juicios, sino dar una asesoría jurídica necesaria para que los estudiantes no se sientan engañados ni desamparados.

¿Cómo contacta un estudiante con vosotros?

Nosotros estamos funcionando a través de la red social Instagram. Nuestro usuario es @insulaeinfo. El estudiante tan solo tiene que enviarnos un mensaje y en 24-36h ofrecemos una respuesta de forma gratuita.

¿Cuáles son las principales demandas que recibís de los estudiantes?

Nosotros, cuando abrimos la cuenta de Instagram, el principal argumento jurídico que queremos darle a los estudiantes es que si han completado más de 6 meses de su contrato, en la mayoría de los contratos, se puede desistir. Este desistimiento del contrato consiste en que el estudiante, avisando con 30 días de antelación al propietario de que voy a abandonar el piso, el estudiante no tiene por qué recibir ninguna sanción e incluso deberían devolver la fianza, a no ser que en alguna cláusula del contrato explique que la fianza no se va a devolver.

Nos encontramos un segundo problema. Las pertenencias que se han quedado en la vivienda. Nosotros lo que recomendamos es que cuando comuniquen al propietario el desistimiento del contrato, habiliten un periodo de plazo una vez finalice el estado de alarma para poder recoger sus pertenencias.

¿Cuál es la principal ventaja que encuentra un estudiante que recurra a Insulae?

El estudiante va a conocer una serie de derechos que tiene, y que probablemente desconocía. Ofrecemos una asesoría jurídica ajustándonos a la ley. Estamos haciendo un trabajo serio.

¿Qué significa “Insulae”?

Insulae eran los bloques de vivienda de en Roma, en los que normalmente vivía gente en régimen de alquiler. Pensamos que era un buen nombre.

¿Por qué recomendaríais a alguien que recurriese a esta plataforma?

Porque ahora mismo somos los únicos que estamos ofreciendo solución profesional a este problema.

¿Qué perspectivas de futuro tenéis? ¿Pensáis seguir cuando termine esta situación?

Queremos seguir, porque el drama de la vivienda y el problema de alquiler para los jóvenes es previo al Covid-19. Después de esta situación, el panorama puede ser aun peor. Creo que es ahí donde tiene que estar Insulae, aportando soluciones y tratando de paliar las consecuencias del Covid-19.